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algunos—; otros vivieron ahí
la mayor parte de sus vidas. Y todos cantaron
y parrandearon alguna vez en Villanueva.
Allí, del 17 al 21 de septiembre
pasados, tuvo lugar la edición no.
25 del Festival Cuna de Acordeones, la celebración
vallenata más grande de Colombia
después del Festival de la Leyenda
Vallenata de Valledupar.
Al igual que en años anteriores,
el evento contó con la presencia
de reconocidas estrellas de la música
vallenata —desde los vallenatos clásicos
hasta los "rancheratos"—:
el Binomio de Oro, Diomedes Dionisio Díaz
(hijo del "Cacique de la Junta"),
los Hermanos Zuleta, Jorge Celedón
y Jimmy Zambrano, entre muchos otros.
Para celebrar el aniversario se inauguró
una escuela de formación musical,
donde los niños de la región
podrán recibir clases de solfeo y
de acordeón para desarrollar sus
talentos. La iniciativa cuenta con el apoyo
del Gobierno Nacional, que a través
del Plan Nacional de Música para
la convivencia del Ministerio de Cultura
pagará los salarios de los instructores,
y de empresas privadas, que donaron los
diez primeros acordeones para la escuela.
El Ministerio también otorgó
al festival la Orden al Mérito Cultural,
por su contribución al fomento de
la música popular de la costa caribeña.
Y para invitar a que el público de
todo el país viajara a Villanueva
para disfrutar de esta gran fiesta, la campaña
Vive Colombia, viaja por ella organizó
viajes desde Cartagena, Barranquilla, Riohacha,
Santa Marta y Valledupar.
Además de los concursos tradicionales
—el rey de la edición, el aficionado,
el infantil, el de las primaveras del ayer
(mayor de 60 años), el de la canción
inédita y el de la piquería—
este año se coronó también
al primer rey de reyes de la historia. El
ganador fue Juan David 'El Pollito' Herrera,
acordeonero y compositor bolivarense de
27 años. El segundo lugar lo consiguió
Xavier Kammerer y el tercero fue para el
veterano José María 'Chema'
Ramos.
Marlon González fue coronado rey
aficionado, Náfer Durán —hermano
menor del legendario Alejo— ganó
en la categoría de las primaveras
del ayer, y Carlos Mario Ramírez
fue nombrado rey infantil. Alcides Manjarrés
se coronó rey de la piquería
—el enfrentamiento de versos entre
dos artistas— y José Jorge Villero
ganó el premio a la mejor canción
inédita, con "Plegaria".
De acuerdo con los comentarios de los medios
de comunicación acerca del festival,
esta edición fue una de las mejores
de los últimos años, no sólo
por la calidad de los artistas que participaron
sino también por la gran cantidad
de público que acudió y participó.
A pesar de que algunos colombianos se olvidan
de la importancia de celebraciones como
ésta, y de que el cubrimiento por
parte de los medios es mínimo, los
festivales de música folclórica
juegan un papel indispensable para que nuestros
ritmos se mantengan vivos a través
de los años. Por eso es necesario
que siempre haya recursos para que puedan
realizarse. Es muy alentador que el Gobierno
apoye estas actividades culturales y que
el público esté sacándoles
todo el jugo que pueden dar.
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